miércoles, 4 de enero de 2017

¿Qué poder tiene el lenguaje positivo? ¿Las palabras curan?

Si nos ayudamos del poder  creativo del pensamiento y utilizamos la meditación seguido de pensamientos positivos repetitivos es posible  mejorar nuestra salud.

Lo que dices es lo que recibes, entonces si nos basamos en una afirmación de un pensamiento positivo relacionado con lo que queremos conseguir y nos centramos repitiendo  este pensamiento conseguiremos  el objetivo deseado.

Las afirmaciones se apoyan en que la realidad exterior  es un reflejo de nuestros pensamientos  predominantes, repitiendo la afirmación entonces cambiamos nuestros pensamientos y la realidad, para ello lo manifestamos hablando o escribiendo durante el día.

¿Cómo hacerlos ?
Tomamos un aspecto de nuestra vida que necesita ser sanado, decidimos que es lo que queremos que ocurra, formulamos en primera persona  una frase sencilla que lo exprese , por
ejemplo: estoy en Paz y la repetimos varias veces. Observando los sentimientos mientras la repites notarás si la frase es la correcta, si no podemos cambiarla .

Repetimos la afirmación todos los días, cuanto más la usas más rápida conseguirás tu objetivo, es importante la constancia y si es posible  también dedicarle un momento concreto del día para realizarlo a modo de meditación también.

Para reforzar las afirmaciones podemos emplear rimas, expresiones como  " por fin hoy", " que  bien estoy", cantarlas, colocar la  afirmación por la casa en lugar visible, grabaciones con nuestra propia voz para escucharla, repetirlas delante del espejo, visualizarte consiguiendolo y sobre todo es importante terminar dando las gracias por nuestra salud y prosperidad. Podemos llevar un diario de afirmaciones y guardar constancia de nuestros progresos.

Estas afirmaciones repetitivas nos hace crear nuevos esquemas de pensamientos por eso es necesaria repetirlas. Si la afirmación es imprecisa debemos  mejorarla para que  tenga más intención y sentimientos.

Si la creencia que tenemos es muy fuerte y estamos demasiado   unido a ella podemos preguntarnos cómo llegamos a esa creencia , si tiene validez ahora y  si estamos dispuestos a dejarla, entonces la cambiamos por otra afirmación y nos decimos a nosotros mismos  " me libero ahora de la creencia ... y la sustituyo por ....

Podemos saber cuales son nuestras creencias observando desde el exterior cómo nos va en, por ejemplo, el matrimonio , la condición física de nuestro cuerpo, autoestima, relaciones, trabajo,... si alguna de estas observaciones muestra desequilibrio es un indicador de bloqueo. Una vez localizado busca  o crea  una afirmación que contenga una  resolución de dicho conflicto.

Si el conflicto es por ejemplo falta de confianza  la afirmación puede ser: Vivo en un universo seguro y amoroso. De esta forma utilizamos el lenguaje para sanar y transformar la vida.

(Extraido  de "Palabras que curan de Douglas Bloch")

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